Volando en V
“Para fin de año duplicamos la base de donantes, hay 500 tenemos que llegar a los 1000. Y en 3 años la organización tiene que poder autofinanciarse”, dijo el manager regional.
Mi respuesta no se hizo esperar: “Perfecto, vamos a lograrlo”.
Realmente mi optimismo rozaba la demencia, mis conocimientos acerca de cómo lograrlo eran nulos. Pero había convencido a un panel compuesto por tres expertos para que me dieran el trabajo. Lo había logrado: era director de fundraising de Greenpeace en Argentina.
De ese momento ya pasaron dos décadas. Hoy me encuentro lanzando este nuevo medio, inspirado en la soledad de esos primeros pasos de mi carrera como fundraiser profesional.
En esos años las fuentes de información en español eran nulas o casi nulas. Lo que se encontraba estaba en inglés, y muy enfocado en procurar fondos de grandes donantes sobre la base de los voluntarios de las comisiones directivas. Yo tenía que hacer todo lo contrario: tenía que buscar donantes de pequeños montos. ¡Muchos!
Gracias a gente que me ayudó fui construyendo mi propia «universidad» para formarme en movilizar voluntades para una causa. Un libro de Mal Warwick, Henri Rosso o Nick Allen; un consejo a tiempo de Fernando Frydman, Julie Crudele o Daryl Upsall; un curso en EE.UU., un congreso en Holanda, un poco de intuición, y el sueño de defender el medio ambiente.
Luego empezó la era digital… y me tiré de cabeza en ella. La bola de nieve se fue armando. Parte de la teoría me sirvió mucho, y lo que no, lo fui inventando a partir de lo que había podido experimentar. Todos esos errores y aciertos me dieron el «título de grado».
¡Cómo me hubiera servido entonces tener un medio como el Club de Fundraising!
Los años pasaron vertiginosamente. Surgieron organizaciones profesionales como Aedros, ABCR y otras, que dieron un salto de calidad en la comunidad que tiene la responsabilidad de movilizar recursos. Una comunidad que hoy está compuesta por más de 400 millones de hispanoparlantes. Y sin embargo seguía habiendo un espacio vacío, poca información en español de calidad internacional sobre fundraising de individuos y movilización pública (activismo y voluntariado digital, entre otras variantes que no involucran transacciones financieras).
¡Era increíble! ¿Cómo podía ser esto, si en los países que marcan tendencia, el financiamiento de proyectos sociales está solventado por individuos… ¡en un 75 %!?
Así que aquí estamos hoy, lanzando el Club de Fundraising, un medio que quiere hacer un aporte para mejorar la sociedad, brindando información, casos, testimonios, entrevistas, y nucleando a todos aquellos que -como yo y muchos otros pioneros del fundraising en español- necesitan acceder a buena información internacional o regional sobre fundraising con individuos.
Y no sólo acceder a buena información… ¡Generar vínculos! ¡Crear redes! ¡Sentir que no estamos solos!
Un club activo y digital. Una comunidad.
Ah… me olvidaba. Nuestro logotipo son tres corazones alados volando en V, juntándose y ahorrando energía para llegar a su destino.
Te invito a que tomemos esta imagen como inspiración, y te pido que sumes tu corazón alado al Club de Fundraising.
PD: No puedo con mi genio y tengo que poner un “call to action”: sé vos también miembro del Club, es totalmente gratuito y muy fácil. Podés recibir la noticias del Club de Fundaising en tu casilla de correo registrándote aquí, o sumarte en las redes sociales Facebook o Twitter.
Marcelo, enhorabuena por la criatura! Es verdad que había un hueco a ver si entre todos podemos llenarlo. Contad conmigo para ayudarlos. Abrazo!
¡Muchas gracias Christian! Compartí el Club en tus redes sociales y esperamos contarte como colaborador muy pronto .
Enhorabuena Marcelo! Estoy seguro que este club será todo un exito! Cuenta conmigo!
Felicitaciones!
Saludos desde Brasil!
Felicitaciones! Excelente iniciativa! Siempre innovando!
Un abrazo desde Perú!